Nos marchamos hoy en la Expo-Hemeroteca al 20 de Noviembre de 1989, fecha en la que se eligió el proyecto del arquitecto sevillano Juan Ruesga Navarro para la construcción del pabellón que representaría a la Comunidad Autónoma de Andalucía en la Muestra Universal celebrada en 1992.
La Comisión de Participación de Andalucía en la Expo 92, presidida por el titular de la Junta, José Rodríguez de la Borbolla, eligió el proyecto del arquitecto Juan Ruesga y de la empresa de servicios Exhibit como futuro pabellón de Andalucía. El conjunto presentado en el proyecto ganador recordaba la cubierta de un barco y tenía como eje central un gran cilindro inclinado a modo de pequeña torre de Pisa. Su altura máxima superaría los veintiocho metros.
El proyecto de Juan Ruesga y Exhibit se impusieron en aquella jornada desde la primera votación entre la terna de proyectos finalistas, en la cual figuraron también el proyecto de José Antonio Carbajal, autor del proyecto presentado por la sociedad de servicios BBV D’92, y también el proyecto de Antonio Gonzáles Cordón, que concurrió con la sociedad de servicios Hispano-92.
El proyecto ganador del arquitecto Juan Ruesga Navarro se trataba de un gran basamento de mármol blanco que representa la cultura tradicional y del que surge un edificio de base elíptica, en piedra arenisca, que representaba la cultura elaborada. Atravesando ambos edificios aparece un edificio inclinado, realizado en chapa con esmalte cerámico azul, que representa la modernidad, el espíritu artístico y científico en evolución, a través del cual vemos nuestra realidad y que nos lleva a lo más alto, como faro mirador.
El gran cilindro está ampliamente perforado, en línea con las casas-torre de la cultura árabe, y su iluminación interior permitió, con la proyección de la luz a través de estos huecos, que el mirador se hiciera notar en el paisaje nocturno durante la Expo.
El concurso para la elección del pabellón se había hecho bajo el lema <<Andalucía, tradición y cambio>>, y la oficina del director del pabellón andaluz, Antonio Rodríguez Almodóvar, había pedido un pabellón de singular estética y avanzada tecnología, con un mensaje unitario y de contenidos claramente reconocibles para cualquier andaluz.
Rodríguez Almodóvar, director del pabellón, reconoció durante la elección del proyecto de Ruesga, que este tenía cierto riesgo formal, pero también está cerca de lo que Andalucía había sido, es y quiere ser. Para Almodóvar, la clave del triunfo de la propuesta de Ruesga había sido la oferta de futuro que representa.
El presidente de la Junta de Andalucía, José Rodríguez de la Borbolla, añadió sobre el proyecto elegido que este pabellón conecta con la idea de que Andalucía es una realidad dinámica y abierta al futuro.