El 5 de febrero del año 1992, se firma el acuerdo de patrocinio entre la empresa Renault y el Ayuntamiento de Sevilla para la campaña <<Cicerones de Sevilla>> promovida por la Comisaría de Sevilla para la Expo’92.
El Alcalde de Sevilla, Alejandro Rojas-Marcos, y el delegado en España de la empresa automovilística Renault, Gerard Gastaut, firmaron aquella mañana en el salón del almirante de los Reales Alcázares un convenio por el que esta firma se convertiría durante la Expo’92 en la patrocinadora oficial de la campaña Cicerones de Sevilla.
Esta campaña estaba dirigida a los jóvenes de Sevilla, tanto en edad como en espíritu, que participaron ofreciendo a los visitantes la ayuda necesaria en su recorrido por la ciudad de Sevilla durante la Expo’92 que tuvo un número de voluntarios para esta campaña de cinco mil jóvenes.
Renault participó con sesenta millones de pesetas en la campaña, la citada firma automovilística instaló durante la Expo en el centro de la ciudad, una carpa-taller donde prestó servicios de reparación y asistencia al conductor durante la Expo.
Al día siguiente de terminar la Exposición Universal de Sevilla el Rey Juan Carlos I de Borbón recibió a los Cicerones de Sevilla. Tras la entrega de los recuerdos, en el patio de la Montería del Alcázar a los cientos de voluntarios que le esperaban. Su Majestad pidió a los guardaespaldas romper el protocolo, acercándose a los jóvenes a saludar vivamente al Monarca.