Tal día como hoy 14 de Marzo del año 1989 tuvo lugar, en el Centro de Arte Reina Sofía de Madrid, la presentación oficial de la mascota que representó la Exposición Universal de Sevilla de 1992. <<Curro>>, un pájaro blanco de patas elefantadas y cresta y pico iluminados con los colores del arcoíris, hacia su aparición en sociedad de la mano de su creador, el ilustrador checo Heinz Edelmann, y del propio comisario general de la Exposición, Manuel Olivencia.
En un acto escueto, breve y nada universal, la mascota se presentaba por vez primera en una reproducción en tres dimensiones y en una película de dibujos de gran calidad artística.
<<Es orgulloso, seguro de sí mismo. Se trata de un pájaro de buena presencia y que ha tenido la suerte de tomar parte en un gran acto. Es inquisitivo, muy curioso. Por descontado, le encanta descubrir cosas. Le gusta tanto que le hace parecer curioso. Lo suficiente como para estar siempre metido en problemas>>. Con estas palabras definía aquella jornada el ilustrador checo Heinz Edelmann a la criatura, mascota y talismán que acompañó todos los actos de la Expo’92.
<<Curro>> es un pseudopájaro de color blanco, patas gruesas, con gesto simpático y nariz enorme que, según Edelmann, no simbolizaba más que eso, una nariz.
Sus mayores y mejores características estriban en el penacho que adorna su cresta y la singularidad de ese pico, ambos iluminados con cinco colores del arco iris.
La mascota fue presentada a los medios de comunicación aquella jornada en el Centro de Arte Reina Sofía iluminada por un foco blanco, como si de una estrella se tratara, Edelmann la descubrió bajo una especie de sombrero de copa en sus tres dimensiones. A continuación se proyectó una película, en dibujos animados, de cuarenta segundos de duración, donde Curro aparecía entre arco iris en un paisaje montañoso y colorista muy característico del ilustrador Edelmann, con el singular pico aún blanco, el pájaro se asomaba a un charco donde se reflejaban los colores y bebía del él coloreándose la nariz al mismo tiempo.
De un inexistente bolsillo surge la popular esfera roja y amarilla, logotipo de la Expo, y los números mágicos: el 9 y el 2. Con una voltereta y un grito semejante al del pájaro loco. <<Curro> se despedía de la pantalla entre aplausos.
Curro fue presentado oficialmente a la ciudad de Sevilla el 22 de Abril de aquel mismo año en una gran fiesta que se desarrolló en la Plaza de España de la ciudad hispalense.