El Banco Bilbao Vizcaya, uno de los cuatro bancos patrocinadores de la Expo, celebró su día de honor en la Exposición Universal de Sevilla. Dicha entidad se ganó a pulso la condición de principal patrocinador de actividades culturales de la Muestra, y además fue una de las grandes empresas privadas que habían contribuido decisivamente a la gestación de la Expo, a través de varias empresas de servicios.
Los consejeros del BBV fueron recibidos por el comisario de la Expo, Emilio Cassinello, a quien acompañaba el secretario de Estado de Defensa, José Miguel Hernández Vázquez, en el Pabellón Real. Tras visitar el pabellón de España, la representación oficial del BBV se trasladó a la oficina del banco en la Isla de la Cartuja, donde tuvo lugar el acto de entrega del premio Andalucía de Novela.
El presidente del BBV durante el año de la Expo, Emilio Ybarra, se mostraba totalmente convencido del éxito de Expo 92, al tiempo que afirmaba aquella jornada que 1992 tenía que ser el año de la reflexión y el salto adelante para España, sin tapar los problemas que sufrían en la integración europea.
El BBV, tuvo una inversión de mil millones de las antiguas pesetas, fue el principal patrocinador de actividades culturales de la Muestra, con gran diferencia sobre el resto, además apostaron desde el primer momento por la Exposición Universal de Sevilla, fueron la primera entidad bancaria en presentar un ambicioso proyecto de presentación de servicios bancarios financieros en exclusiva. Después se optó por la responsabilidad compartida.
A través de la sociedad de servicios BBV Desarrollo 92, y en colaboración con Ayesa, la más importante empresa de ingeniería andaluza, fueron socios de diversas sociedades ligadas al proyecto, tales como Crasa, Multivivienda, Cedasa, Cetasa, Sogexpo, Sadespo, además de patrocinar al pabellón de la ONU y gestionar los de Euskadi, Energía, Valencia, Suiza.
Como curiosidad de la jornada de Honor del Banco Bilbao Vizcaya en el recinto de la Expo 92 se sorteó un <<libretón>> extraordinario de dos millones de pesetas entre todos los visitantes que acudiera al recinto ese mismo día. Para ello un total de 148 personas, ataviadas con gorros y camisetas identificativos del <<BBV Expo 92>>, estuvieron repartidos en las puertas de la Expo, haciendo entrega de una papeleta a todos los visitantes, el nombre del ganador se dio esa misma noche durante el recital de José Manuel Soto en la Plaza Sony.
Como patrocinador principal de actos culturales en la Expo, la actuación del BBV en el desarrollo de la muestra tenía un fuerte contenido artístico. Patrocinador de la ópera <<Carmen>> que reunió a las primeras figuras del canto, ésta fue sólo una del centenar largo de obras artísticas que se insertaron en el programa oficial de la Expo, bajo el patrocinio del BBV.