Aquel 10 de Marzo de 1992 llegó a Sevilla procedente de Isla Cristina, la nao «Victoria».
Para recorrer las millas que la separaban del muelle de las Delicias, el buque se sirvió de un potente remolcador, el «Punta Cervi», de la Dirección General de la Marina Mercante. No había tanta expectación como el día del naufragio, aquel 22 de noviembre del año 1991, pero esta característica se vio compensada por la ausencia de incidentes desde su partida hasta el momento de atracar.
Para alcanzar la capital hispalense, la nao Victoria también se sirvió de otro remolcador, este de menor potencia, que iba detrás de ella y la ayudaba únicamente en momentos complicados, pero finalmente el viaje hasta Sevilla se realizó sin problemas.
Cuando llegó al muelle de las Delicias, la nao fue colocada entre la Pinta y la Santa María. De esta manera sólo faltaba la réplica de la Niña, que partió un día antes de Cartagena y que llegaría a Sevilla unos días después para su traslado junto a las otras dos carabelas y la nao hasta el Puerto de Indias en la Cartuja.
Pero para poder realizar ese traslado por el rio Guadalquivir y llegar hasta el Puerto de Indias sin que hubiera ningún incidente al pasar bajo los puentes se tuvo que liberar los mástiles y velas de las embarcaciones y de esta manera emprender el viaje hasta la zona habilitada junto al Pabellón de la Navegación donde se pudieron visitar durante los seis meses de la Muestra Universal.
La arribada a la isla de la Cartuja se produciría unos días después, ya que para realizar esta operación tuvieron que dragar el río con idea de que hubiera una profundidad suficiente para que pudieran navegar sin problemas.
La empresa autora de la réplica de la «nao Victoria», Naves de Época, habían realizado también la «Pinta» y la «Santa María». La réplica de la «Niña», es obra de la Armada, del arsenal militar de Cartagena. Cabe destacar la existencia de dos copias de cada modelo durante la Expo: un juego estaba navegando por el continente americano, mientras que el otro permaneció en la Cartuja durante los meses que duró la Expo.